Terapia Psicológica y Flores de Bach

lunes, 16 de febrero de 2015

Amor...




Amor es una palabra muy poderosa que últimamente ha estado siendo muy mal usada y estando aún al calor de las brasas del 14 de Febrero creo que podríamos explotarlo un poco más...

El Amor como tal es difícil de definir dado lo abstracto de su naturaleza, por lo que considerarse como un conjunto actitudes, emociones y experiencias que producen un sentimiento de apego y afecto hacia algo. Por default cuando hablamos de amor nuestra mente nos dirige al amor entre parejas pero hay un amor mucho más importante que últimamente se ha perdido de vista y se ha distorsionado increíblemente, el amor propio.
La capacidad que tengamos de amarnos a nosotros mismos se reflejará en nuestra autoestima, y por consiguiente en qué tipo de lazos estableceremos para con los demás. 

Lo que vibras atraes. Dios, el universo, el destino o como tus creencias le permitan llamarle, es súmamente sabio y en cada paso que des en tu camino pone los recursos necesarios para que aprendas las lecciones que te ayudaran a ser pleno y feliz. Es por esto que tanto las situaciones como las personas a las que atraemos en nuestras relaciones (en todos los ámbitos:trabajo, pareja, amigos, etc.) son aquellas que reflejarán nuestras riquezas y carencias para que podamos identificarlas y cambiarlas o mejorarlas. Aquí es cuando nos equivocamos regularmente pues en lugar de saltar las "piedras" y quitarlas de nuestro camino nos enamoramos de ellas y las empezamos a recolectar. Aquí es donde se puede responder esta pregunta tan recurrente de ¿Porqué siempre me pasa a mí? ¡Si! ¡tu escoges!, ¿a poco crees que es obra del azar que de 15 galanes o galanas 14.5 sean celosos, manipuladores o dramáticos? 

En la medida que conozcamos y reconozcamos nuestras virtudes y defectos podemos crear una auto-imagen positiva que a la vez nos dé oportunidad de desarrollar el amor por nosotros mismos y por consecuencia hacia los demás. Este proceso parece muy sencillo, sin embargo las experiencias de vida que nos formaron no siempre son o fueron beneficiosas para la formación de parte de nuestra personalidad, muchas veces el dolor, el miedo y el resentimiento (que algunas veces no son propios, sino aprendidos) nos limitan y no nos permiten desarrollar una inteligencia emocional adecuada.
Muchos personajes y autores célebres han coincido en que no puedes definirte por lo que te pasó, si no por lo que puedes legar a ser, y personalmente lo comparto con ellos. Entrar a un proceso terapéutico para solucionar o deshacernos de emociones negativas es de vital importancia para empezar a definirnos conforme a nuestras propias expectativas, haciéndonos cargo de lo que nos corresponde y soltando lo que no. Como siempre lo he mencionado a mis consultantes implicará trabajo y esfuerzo pero la recompensa siempre será mucho mayor.
¿Qué esperas? Conócete, satisface tus necesidades y deja de buscar fuera lo que únicamente puedes encontrar dentro de ti. 

Ámate intensamente y recibirás lo que en verdad mereces.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario